La música, la música, para mí es algo terapéutico y es que tengo TDAH (trastorno de déficit atencional con hiperactividad) desde niño, y según los médicos ahora en mi adultez, aún lo tengo, pero residual. Es un karma y resulta que te hace tener percepciones distintas a los demás, a acentuar gustos y pasar por periodos de latente obsesión con sensaciones/pasiones aleatorias, como también a desatender cuestiones que realmente eran importantes. Se aprende a vivir con eso, y si es un cacho cuando no se tiene un entorno que te ayude y estimule con cuestiones saludables, es fácil caer en malas obsesiones. Como también como algunos sabrán es nuestra más conocida virtud, nos cuesta mucho lograr concentrarnos en una cuestión por más de 10 segundos, quizás hasta menos. Tenemos la cabeza en 10 cuestiones a la vez, quizás mas. En lo particular para mí sacar la ingeniería fue algo más que un cacho e insomnio del desagradable. Mi punto es que a lo largo de la vida es la música una de las cuestiones que están presentes, ya sea interpretandola o escuchándola con una concentración absurda, y aunque el deseo por oírla con mayor fidelidad empezó hacen unos años, mi tema es que cuando la escucho logro paz. Así que sí, entiendo de todas formas eso de lograr levitar del sillón con alguna pieza musical. Aunque en mi caso sí tengo varios familiares con éste particular hobby, vengo siendo la primera generación digital (nací millennial ok) Saludos y un gusto desde el gélido Puerto Montt Enviado desde mi LG-H840 mediante Tapatalk